
Proyecto liderado por Matías Sjogren, miembro de la Plataforma de Emprendimiento de Fundación Chile, ofrece una solución viable medioambientalmente para el tratamiento de aguas servidas o riles de una manera limpia, eficiente, de bajo costo y amigable con el ecosistema.
Biofiltro, proyecto liderado por Matías Sjogren, miembro de la Plataforma de Emprendimiento de Fundación Chile, obtuvo el primer lugar en la versión 2011 de Cleantech Open, certamen de empresas de tecnologías limpias considerado como el más importante a nivel internacional. La iniciativa ofrece una solución viable medioambientalmente para el tratamiento de aguas servidas o Riles de una manera limpia, eficiente, de bajo costo y amigable con el ecosistema.
En la etapa final del concurso, que se realizó en San Francisco, Estados Unidos, entre el 15 y 16 de noviembre, participaron los proyectos de los cinco países: Suecia, Dinamarca, Reino Unido, Francia y Chile. Por su parte, Biofiltro se impuso como líder de innovación y espíritu empresarial a nivel mundial.
“Este concurso valida el aporte del proyecto en el ámbito social y medioambiental. La tecnología que usamos es mucho más sencilla que todos los otros finalistas, sin embargo, ganamos. Eso refuerza el hecho de que la sustentabilidad se encuentra hoy en las cosas simples y que hay que volver a buscar las soluciones en la misma naturaleza”, explicó Matías Sjogren.
Respecto del apoyo de Fundación Chile, el profesional se mostró agradecido. “Desde la organización he recibido apoyo profesional, de estrategia y de marca. Pero también me han entregado un soporte más personal. Ellos creen de verdad en el proyecto y eso me ha dado tranquilidad y fuerza para seguir trabajando”.
La empresa ganadora diseña, instala y opera plantas de bioflitro dinámico aeróbico en Chile y en el extranjero. Además, ha permitido que las plantas de tratamiento sean una alternativa para la industria y viviendas, en especial para lugares de escasos recursos por su bajo nivel de inversión y costos de operación.
Biofiltro ha instalado plantas de tratamiento a través de su innovadora tecnología para tratar aguas y riles de distintas fuentes y plantas de tratamiento para lodos inestables de sistemas tradicionales. Dentro de sus productos destacan la evaluación de proyectos; construcción e instalaciones de las plantas; asesorías medioambientales tales como estudios de impacto ambiental, resoluciones sanitarias y medición de huella de carbono; y capacitaciones para la correcta operación y mantención de las plantas.
La iniciativa se ha destacado por una operación a bajo costo operacional, logrando una disminución en un 35%. El producto no genera lodo y su único desecho generado es humus de lombriz, que puede ser utilizado como abono orgánico en la agricultura.
Proyecto Biofiltro había obtenido en mayo de este año el primer lugar en el concurso Green Start Up, organizado por la Universidad del Desarrollo y Fundación Chile, certamen que congregó 85 negocios de emprendimientos.