Día Mundial de la Normalización, 14 de octubre de 2014

Las Normas permiten competir en igualdad de condiciones

Estamos viviendo en un mundo que está experimentando profundas transformaciones a todo nivel. Las economías nunca han sido tan interdependientes como lo son ahora. Los productos que se encuentran hoy en el mercado ya no se elaboran en un solo país; son  fruto de la globalización. Antes de que lleguen al consumidor final, los productos finales han transitado a través de diferentes países donde se les ha ido agregando valor.
A las pequeñas y medianas empresas que aplican las normas internacionales les resulta más fácil lograr certificar sus productos y estar en mejores condiciones para competir y  vender en cualquier parte del mundo. Las normas internacionales permiten a las PYME  participar en las cadenas globales de valor y beneficiarse de la transferencia de la tecnología.
Los países que han integrado las normas internacionales en sus políticas y regulaciones son capaces de proteger mejor a sus poblaciones y darles una mayor variedad de
productos de calidad.
En un mundo multipolar, donde la influencia y peso económico de las economías emergentes está cambiando el equilibrio de poderes, las normas internacionales estimulan el comercio, superan las barreras comerciales artificiales y ayudan a crear reglas de juego equitativas. Esto permita que las empresas, industrias y economías sean  más competitivas, facilitando las exportaciones, y estimulando la diversificación a nivel nacional e internacional.

Fuente : Página web de la Comisión Panamericana de Normas Técncicas