Ribetes que lindan en lo dramático se ha transformado la situación de la contaminación por metales pesados en la ciudad de Antofagasta y que podría estar afectando en forma directa principalmente a niños y niñas de jardines en las inmediaciones del puerto de la ciudad. Dramático ya que luego de una tercera toma de muestras y sus correspondientes análisis de plomo arrojaron valores contradictorios con los inicialmente informados y por lo que se aprecia, el desorden no es menor ya que no se vislumbra alguna autoridad liderando el tema de una manera técnica, profesional y eficiente que entregue tranquilidad, no sólo a las familias de esos niños y niñas, sino a la población en su conjunto.
La Corporación Municipal de de Desarrollo Social de la ciudad , organismo del cual dependen los jardines infantiles o colegios más directamente afectados quieren hacer sus propios análisis en pelo y uñas, mencionan que solicitarán los servicios de Laboratorios Acreditados para dar mayor seguridad a sus análisis, producto de los resultados tan dispares obtenidos de quienes han participado.
Foto Archivo : Puerto ATI, antes de la construcción del nuevo Galón de acopio de Concentrados
Requisitos que deben cumplir los Laboratorios
Lamentablemente lo que no saben los antofagastinos y los chilenos en general, es que en Metrología, ciencia del arte de medir, nuestro país no tiene una institucionalidad muy robusta en este tema en particular. A nivel internacional existen herramientas que permite que los laboratorios que realicen cualquier tipo de ensayos, lo hagan con los requisitos mínimos para garantizar que lo que se está realizando este bien, una de esas herramientas es la norma ISO 17025 (en Chile cuando se homologa una norma ISO se le antepone la sigla NCh quedando como NCh ISO 17025) que establece los “Requisitos generales y específicos relativos a la competencia técnica de los Laboratorios de Ensayo y Calibración”, en esa norma se incorporan todos los requisitos de las normas ISO, aplicables al alcance de los servicios de Ensayo y Calibración que forman parte de un Sistema de Gestión de Calidad de Laboratorios. Tenemos por lo tanto, que todos los Laboratorios de Ensayos que efectúan análisis químicos de minerales, aguas, alimentos, metales, suelos, aire, combustibles, etc, les aplica esta norma, en cambio a los Laboratorios que realizan ensayos en la cual están incluidas las personas le aplica la ISO 15189 «Laboratorios Clínicos-Requisitos particulares para la calidad y la competencia».
Un Laboratorio se encuentra acreditado cuando la autoridad técnica certifica que alguna determinada organización cumple los requisitos establecidos en algunas de normas ya mencionadas, en Chile el organismo acreditador es el Instituto Nacional de Normalización, (INN) posteriormente los laboratorios se inscriben ante la autoridad fiscalizadora correspondiente (SISS, Servicio de Salud, Aduana, Sernapesca, SEC, etc) para efectuar determinados ensayos dependiendo del alcance que hayan acreditado.
Un tema relevante que debe considerar la población en general, entendiendo que estos temas son muy técnicos, es la matriz en la cual se encuentra el elemento químico que se desea determinar. Un Laboratorio que se encuentra acreditado para análisis en una matriz de agua potable, no necesariamente tiene las competencias para determinar ese elemento en una muestra de suelo, sangre, gasolina, carne de pollo o en alguna fruta ya que en rigor, lo que los laboratorios acreditan ante del INN es un método para determinar un elemento químico o parámetro en particular, por ejemplo plomo en agua potable, mercurio en carne de pollo, arsénico en crustáceos, coliformes fecales en aguas servidas, cobre en minerales o concentrados, etc.
En casi todas las capitales regionales, Antofagasta incluida, existen laboratorios Químicos dependientes de la Secretaria Regional Ministerial de Salud, pero acá ya comenzamos con los primeros problemas, según la información que el INN publica en su web, sólo los Laboratorios de las regiones de Valparaíso y Los Rios están acreditados y sólo en microbiología de aguas para determinar los patógenos más habituales presente en las aguas de consumo de la población.
Actual vista del sector norte de Antofagasta
Ahora, si bien lo ideal es, que los laboratorios tengan implementados sistemas de gestión de calidad eficientes bajo norma, no significa, necesariamente, que ese laboratorio este imposibilitado de emitir resultados, pero su credibilidad pasa a ser cuestionada como lo fue en su momento el informe del Laboratorio de la BICRIM de la Policía de Investigaciones (PDI) que analizó algunas muestras de aguas en la localidad de Caimanes en la región de Coquimbo y que presentaban niveles altos de algunos elementos en relación a las normas con que se compraban, paradojalmente los cuestionamientos venían de otro organismo del Estado, en este caso SEREMI de Salud de la región de Coquimbo. Eso nos lleva muchas veces a evidenciar la fragilidad de nuestro sistema de medición que como país deberíamos ir desarrollando. No porque sea una Universidad o alguna repartición pública, se puede confiar a plenitud en lo que realizan. Ese respaldo debe venir por los reconocimientos que ya mencionábamos a través de normas indicadas.
Hemos escuchado o leído que los análisis se han efectuado en las contramuestras, pero pareciera que nos todos tienen claro el concepto. Se llama contramuestra cuando en el proceso de obtención de la muestra esta se divide en dos partes que se, trasportan, almacenan y guardan (si se requiriera) en similares condiciones. Una muestra es la que se analiza y la otra sirve de contramuestra en caso que haya alguna duda con el resultado que se obtuvo o haya habido un problema durante el análisis. Si una muestra se toma en condiciones distintas (fecha, hora, personal que realiza la función, etc) pasa a ser otra muestra y no contramuestra como en algunas ocasiones se menciona por error en algunos medios.
Lo ideal es que las muestras sean tomadas y analizadas por organismos con las competencias necesarias. En algunos casos para lograr una mayor independencia, la toma de las muestras la realiza un organismo y los análisis químicos otra entidad.
Aseguramiento y Control de Calidad de los Resultados
Otro tema no menor, es que los laboratorios deben asegurar sus resultados empleando Materiales de Referencia Certificados (MRC), que corresponden a muestras que se le conoce su concentración, lo cual permite a quien realice los análisis compararse y determinar si presenta alguna desviación con respecto al valor que declara su MRC (también llamada muestra estándar o muestra patrón). El material de referencia debe, además, tener una concentración del elemento de interés en el rango de concentración de las muestras que se están controlando, como eso generalmente se desconoce se deben insertar MRC con la concentración que los profesionales a cargo creen que pueden tener las muestras que se pretende analizar o controlar.
El Instituto de Salud Pública de Chile (ISPCH) cumple la función de ser el organismo técnico en el país en estas materias, incluso forma parte de la Red Nacional de Metrología, pero contrario a lo que podría creerse no tiene acreditados los análisis de plomo en sangre , pero si participa en Rondas Interlaboratorios organizadas por entidades en EE.UU y España. No se conoce cuál ha sido el desempeño del laboratorio del ISP en estas instancias, esperamos que el adecuado y ojalá en algún momento esa información pueda estar disponible para la ciudadanía. El ISP si tiene acreditado bajo ISO 17025, análisis físico-químicos y microbiológicos en aguas de distinta naturaleza, también tiene acreditados bajo ISO 15189 análisis en las áreas de virología, inmunología, parasitología, microbiología y genética molecular.
Es muy probable que las mismas autoridades , no sólo las gubernamentales sino los que han estado a cargo de estos temas, desde distintas organizaciones y que nos tienen en esta condiciones como país, dirán que la situación no es tan dramática y pretendan hacer comparaciones con nuestros vecinos indicando lo bien que estamos, pero a no pocos se les olvida, al igual que otros temas, que la comparación debe realizarse con los países que tienen una PIB similar al del Chile, y bajo ese prisma nos falta mucho por hacer. Ya no podemos seguir haciendo las cosas como se hacían antes, debemos mejorar nuestras capacidades para realizar las mediciones que estos nuevos escenarios nos demandan. Lamentablemente cada cierto tiempo, nos enteramos de iniciativas que van en la dirección opuesta a lo que debemos realizar como país, el cierre el Centro de Metrología Química de la Fundación Chile el año pasado es una muestra de ello, paradojalmente habiendo tenido toda esa experiencia, equipamiento y Know How no se aprovechó y hoy la Superintendencia de Medio Ambiente debe contratar esos mismos servicios en el extranjero. El Centro Nacional del Medio Ambiente (CENMA) hoy dependiente de la Universidad de Chile, fue otro de los esfuerzos que se han realizado a nivel estatal para abordar los temas ambientales pero que con al pasar del tiempo no se tiene claro el rol que desempeña y muchas veces por la falta de financiamiento derivan en la prestación de servicios para lograr mantenerse en funcionamiento.
Conocer las Causas de las diferencias
Otro tema que no ha quedado del todo claro, es conocer las causas de las diferencias en los resultados, de hasta 10 veces más en algunos casos. El Laboratorio de la Universidad de Antofagasta, ha indicado que el problema se habría debido a un error en la toma de las muestras o posterior manipulación de ellas ya que no habrían sido tomadas por ellos, no se debe descartar que sea un problema de unidades (umol/dl, ug/ml, ug/dl) o que se hayan realizado incorrectamente los cálculos, pareciera impensado, pero a la falta de una explicación convincente, las elucubraciones dan para mucho. Independiente de los anterior, una cosa si se puede concluir, quien informó los resultados no realizó una revisión de los valores extrapolando los datos a otra situaciones y tampoco hizo una contrastación con resultados que todos los meses se les realizan a decenas de trabajados en el país que trabajan en el análisis de ensayo a fuego (Fire Assay) en los laboratorios de análisis de oro y plata en minerales y concentrados metálicos, con eso datos a la vista, inmediatamente se habría dado cuenta que había un problema y los datos ni siquiera debería haber salido a la luz pública. Tampoco está claro cuál de los laboratorios de la Universidad es el que participó, ya que ahora se conoce una orden de compra emitida a la UATSA por el Servicios de Salud, pero informaciones anteriores indicaban que habría sido el Laboratorio de Química Ambiental de esa misma Casa de Estudios quien habría realizado los análisis.
Hay iniciativas que nos dejan un poco más tranquilo, el ISPCH viene realizando rondas interlaboratorio de análisis de plomo en sangre desde hace unos 6-7 años, los laboratorio que participan han sido casi los mismos Cesmec en Santiago, Cesmec en Calama (antes los realizaban en Antofagasta), el Laboratorio de Higiene Industrial de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) en Santiago, el Centro de Higiene Industrial del Instituto Seguridad del Trabajo (IST) en Viña del Mar y el Laboratorio de Toxicología Ocupacional del ISPCH, no hay otras entidades que les interese participar y es de esperar que a la luz de los bochornosos casos que hemos comentado, comiencen a tomarse más en serio estos temas. Por el momento, ninguno de las organizaciones mencionadas está acreditada y debería ser su próximo objetivo, claramente son las organizaciones que más experiencia tienen en el país. Estas rondas permiten a las organizaciones participantes, confirmar o mejorar el desempeño de su laboratorio, pueden identificar problemas de ensayo y de medición e iniciar mejoras, les sirve, también, para comparar métodos y procedimientos, capacitar a los funcionarios promocionando la confianza en el personal, entre otro objetivos. Uno de los últimos trabajos se muestra aquí. Informe ronda 14-02 PLOMO EN SANGRE
Es de esperar que las autoridades se hagan asesorar por los especialistas adecuados. En materias de salud de la población y en temas ambientales los desafíos que como país deberemos enfrentar cada día son mayores y habrá que hacerlo acorde a los problemas que se nos vayan presentando, el desarrollo del país debe ir de la mano con la estructura metrológica que se requiere.
Revista Química Industria & Minería